En estos momentos es necesario desconectar un momento, centrarse en el momento presente, mirar los problemas que nos preocupan con perspectiva....y respirar, sobre todo respirar. Algo tan sencillo como cotidiano y que sin embargo no practicamos como debiéramos ni utilizamos como herramienta anti-estrés.
Hoy queremos recomendaros algunas técnicas de "meditación" basadas en la respiración para poder conseguir en pocos minutos relajarnos, y ver nuestros problemas desde otro punto de vista, para que en lugar de "pre-ocuparnos" podamos ocuparnos directamente de ellos :)
El secreto está en centrarnos en el momento presente, porque ¿cuántas veces nos descubrimos a nosotros mismos pensando en mañana, o en la semana que viene, o en ayer, o en cualquier otro momento que no es el ahora? por culpa de eso nos estamos perdiendo este momento único, que estamos viviendo ahora mismo y que nunca se va a repetir.
Para conseguirlo vamos a utilizar la respiración, tratando de ser conscientes de cómo respiramos. A continuación te proponemos distintas técnicas según lo que andes buscando o lo que necesites en un momento concreto.
"Pequeño descanso"
Duración: 3 minutos
Objetivo: Desconectar en momentos puntuales de estrés, disminuir la ansiedad o frenar el inicio de la misma, centrarnos en qué estamos haciendo o en qué queremos hacer.
Método: Puedes estar sentado, tumbado o de pie, y es una técnica que puedes practicar en cualquier sitio: en clase, en el trabajo, en el metro, en un parque, antes de dormir (te quedarás roque en un segundo)...para ello vamos a cerrar los ojos (importante) y vamos a hacer una serie de respiraciones sin pensar en nada más que en cómo entra y cómo sale el aire de nuestro cuerpo. En cada respiración vamos a tomar bastante aire por la nariz sintiendo como se llenan los pulmones, lo vamos a retener durante unos segundos y lo vamos a expulsar lentamente por la boca. Vamos a hacer dos tandas de 10 respiraciones, contando cada una de ellas pero para la primera tanda diremos el número mentalmente antes de cada inspiración y en la segunda tanda lo haremos cuando acabe cada espiración. Cuando acabemos abriremos los ojos lentamente y pensaremos en el "aquí" y el "ahora".
"Relax, relax, relax"
Duración: 20-30 minutos
Objetivo: Relajarnos después de un día con muchas tensiones, prepararnos antes de tomar una decisión importante, intentar combatir el insomnio.
Método: Puedes estar sentado aunque en este caso es más recomendable estar tumbado o recostado. Igual que en el caso anterior en cada respiración vamos a tomar bastante aire por la nariz sintiendo como se llenan los pulmones, lo vamos a retener durante unos segundos y lo vamos a expulsar lentamente por la boca. En esta ocasión vamos a centrarnos con cada respiración en una parte de nuestro cuerpo y visualizar cómo llega el aire hasta esa zona: pies, gemelos, rodillas, muslos...etc de abajo a arriba y luego en sentido contrario. En cada zona que nos centremos visualizaremos como esta zona se hincha y se deshincha con cada respiración. Después, y sin dejar de ser conscientes de cada inspiración y espiración, nos vamos a imaginar en un lugar agradable, real o ficticio, y nos quedaremos allí unos minutos antes de abrir los ojos. Igual que antes cuando abramos los ojos lo haremos lentamente y pensaremos en el "aquí" y el "ahora".
"Reconciliar"
Duración: 10-15 minutos.
Objetivo: Limar asperezas con alguna persona con la que tenemos un conflicto o intentar sobrellevar una situación que no nos es agradable.
Método: Sentados o tumbados iniciaremos con unas respiraciones del estilo de cualquiera de las dos de arriba. Cuando ya estemos centrados en lo que estamos haciendo y desconectados del resto entonces empezaremos visualizando cómo le damos un abrazo a un buen amigo/a, alguien a quién queramos mucho, visualizaremos cómo tenemos un gesto cariñoso y nos centraremos en sentir todas las emociones buenas que eso nos aporta. Después pasaremos a pensar en una persona "neutra" en nuestra vida, alguien a quien no conocemos pero que nos cruzamos diariamente (una persona del metro que hace el mismo trayecto que nosotros, el chico de la biblioteca de dos mesas para allá que tiene el mismo horario de estudio que nosotros, el portero del edificio dónde trabajamos...) y visualizaremos cómo tenemos un gesto agradable con esa persona, una sonrisa, un "gracias", cederle el asiento...intentando mantener las sensaciones buenas de la visualización anterior. Por último pensaremos en esa persona con la que tenemos un conflicto, y visualizaremos cómo nos cruzamos con ella por la calle y cómo intercambiamos un par de frases en tono agradable "hola que tal te encuentras" "que tengas un buen día" o la que en ese momento se nos ocurra, pero siempre algo cordial. Esto mismo lo podemos hacer pero en lugar de con personas visualizando situaciones, si lo que queremos es aceptar una situación que estamos viviendo y no nos gusta: empezaremos pensando en una actividad con la que disfrutamos, luego una que ni fú ni fá, algo rutinario, y terminaremos con la situación que nos desagrada pero manteniendo las sensaciones positivas de la primera visualización. Para que tenga efecto tendremos que realizar esta técnica de seguido durante varios días, y poco a poco iremos viendo como esa persona ya no nos despierta sentimientos negativos o cómo esa situación que nos incomoda se acaba normalizando.
Todas estas técnicas se pueden hacer en silencio o acompañadas de alguna música relajante, sea de tipo que sea, lo único importante es que a nosotros nos transmita calma (aunque es más recomendable que no tenga letra, para evitar desconcentrarnos), y recordad que aunque al principio resulte difícil dejar la mente en blanco y centrarnos sólo en el segundo presente...
Y ahora os deseamos que tengáis un relajado fin de semana y sobre todo...¡¡¡que disfrutéis cada momento como el único e irrepetible que es!!!
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